Lorca

Lorca incorpora a su patrimonio una ruta de miradores y plazas de su zona monumental gracias al trabajo de los talleres de empleo y de la concejalía de Casco Histórico

Los trabajos ejecutados en estos miradores incluyen la instalación de señalización informativa, incorporación de mobiliario urbano, instalación de bolardos, mejoras de jardinería, sistema de riego, iluminación, demolición y renovación de firme, construcción de nuevos muros para garantizar la estabilidad, incorporación de elementos de cerrajería (pasamos, barandillas..), instalación de aplacados, adoquinado, además de farolas, papeleras y bancos, entre otros elementos.

La Concejal de Desarrollo Local en el Ayuntamiento de Lorca, Sandra Martínez, ha supervisado esta mañana los trabajos que se están llevando a cabo por parte de esta área municipal para mejorar una batería de miradores ubicados principalmente en los barrios altos de nuestra ciudad. Se trata de una tarea que viene siendo ejecutada por parte de los beneficiarios y alumnos de diferentes talleres de formación y empleo del Ejecutivo Municipal, con el objetivo final de establecer una ruta de miradores que puedan ser visitada tanto por parte de los lorquinos como de quienes nos visitan. Estamos hablando de recuperar y aprovechar una serie de miradores, que con el paso del tiempo presentaban varias deficiencias. Una vez corregidas, apostamos por ponerlos en valor, incorporándolos al patrimonio urbano de Lorca como un aliciente más para esta zona de la ciudad.

Sandra Martínez ha explicado que los trabajos ejecutados en estos miradores incluyen la instalación de señalización informativa para que todas las personas puedan identificar el enclave y su nombre, así como incorporación de mobiliario urbano, instalación de bolardos, mejoras de jardinería, sistema de riego, iluminación, demolición y renovación de firme, construcción de nuevos muros para garantizar la estabilidad, incorporación de elementos de cerrajería (pasamos, barandillas..), instalación de aplacados, adoquinado, además de farolas, papeleras y bancos, entre otros elementos.

Esta línea de trabajo, en la que se incluye el desarrollo de programas sociales, de mejora del entorno y educativos, constituye un impulso necesario para que esta zona potencie su calidad urbana y está logrando recuperar auténticas joyas de nuestro patrimonio histórico como es el caso de las iglesias de San Roque, Santa María y San Pedro, entre otros enclaves de notoria relevancia, además de lograr la mejora de casi un centenar de calles ubicadas en los barrios altos de nuestra ciudad.

El itinerario, que será difundido a través de dípticos informativos impresos y disponibles en la web municipal, enlaza una sucesión de miradores y plazas tanto durante el ascenso y descenso de la Iglesia de San Juan, como en la parte baja del casco histórico. Durante el recorrido podemos disfrutar de distintas perspectivas de la ciudad, pudiendo observar desde varios puntos de vista el conjunto de esta y si entorno, de sus hitos urbanos y arquitectónicos más representativos. A lo largo del recorrido se recorren siglos de historia, desde la antigua ciudad fortificada a la Lorca contemporánea. El recorrido incluye las siguientes visitas:

Antiguo Convento de la Merced y Muralla Almohade: punto de partida y final, se trata de un enclave caracterizado por el antiguo Convento de la Merced, y por un tramo de la muralla almohade que data del S.XII. E1 convento contiene elementos de los siglos XVI y XVIII, además de una reciente intervención de principios del actual. En este conjunto también podemos encontrar el Centro de Visitantes de Lorca Taller del Tiempo, un enclave que ofrece un amplio aparcamiento que nos puede resultar muy práctico para estacionar nuestro vehículo y realizar el recorrido a pie.

Porche de San Antonio: construido en sillería en el S.XIII. fue levantado sobre una puerta anterior de menores dimensiones, de la época almohade. Se trata de la única puerta medieval en forma de recodo (forma defensiva típicamente andalusí) que se conserva en la Región de Murcia.

Subida a San Juan: se realiza a través de unos tramos de esclareas de reciente ejecución, desde las que podremos observar el cauce del Guadalentín y los barrios norte, la zona de Serrata, las diputaciones de Barranco Hondo, Río y Parrilla, y las sierras de La Torrecilla y del Gigante.

Iglesia de San Juan: como punto final de la ruta ascendente, llegamos al conjunto que forman la Iglesia de San Juan y la amplia explanada de piedra situada al noroeste de la misma. Se trata de un espacio que se desarrolla al abrigo de la iglesia, y que dirige nuestra mirada hacia las serranías y diputaciones situadas al noroeste de la ciudad, mostrándonos en un vistazo una porción de lo que es el vasto territorio del municipio.

Atrio de San Juan: inicio del descenso, nos encontramos un pequeño mirador que nos ofrece unas amplias vistas de las iglesias de Santiago y San Mateo, de su contexto urbano. y del campo de Lorca, desde la Virgen de las Huertas hasta la Sierra de la Almenara, que actúa como telón de fondo. Seguidamente nos encontramos con la Glorieta Atrio de San Juan, lugar de esparcimiento donde parar a conversar y descansar.

Descenso hacia San Patricio: atravesamos el Barrio de San Juan, encontrando los miradores situados en la Calle Hoyos y una sucesión de espacios ajardinados entre las calles San Jorge y Gomélez, para desembocar en una pequeña plaza de la Calle Zapatería. Dicha plaza se desarrolla en estrecha relación con un antiguo edificio docente erigido en el S.XIX. En el trascurso de esta tradicional calle nuestros pasos nos llevarán a descubrir el Colegio de las Madres Mercedarias y la fachada de su capilla, construida a mitad del S.XVIII en estilo Barroco.

Calle Abad de los Arcos: localizamos la fachada principal del Conservatorio Narciso Yepes, que data del último cuarto del S.XVIII, a caballo entre los estilos Rococó y Neoclásico. Pasamos junto a la aterrazada Plaza de los Coros y Danzas de Lorca y de la Plaza del Cardenal Belluga, donde se situaba la plaza de abastos desde 1791 hasta 1860, al abrigo de la Colegiata de San Patricio. La arcada que encontramos en ella es una reconstrucción moderna del elemento original que la ocupaba en dicha época.

Antigua cárcel, edificio del Pósito y Torre Almohade: bordeamos la Antigua Cárcel, construida en el S.XVIII bajo el reinado de Carlos III, y el edificio del Pósito, original del S.XVI. Localizamos la torre almohade del S. XII, llegando en primer lugar a su espacio de acceso, un mirador en la esquina de las calles Rojano y Pósito, orientado hacia la Iglesia y el Barrio de San Pedro. Descendemos por la escalera de piedra, llegando a una pequeña plaza que nos ofrece una vista de la torre en su máxima dimensión vertical, desde una posición antaño extramuros.

Plaza del Caño: de antigua tradición, toma su nombre de unos caños que en ella se alojaban, gracias a los que la población se surtía de agua potable. La plaza se sitúa ante el edificio de los Juzgados, lugar de la antigua Casa del Corregidor, junto al antiguo edificio del Pósito. La portada de San Patricio completa la vista de la plaza que conserva la espacialidad original de su configuración renacentista, original del S.XVI.

Plaza de España: enclave renacentista por excelencia, está delimitada por la Colegiata de San Patricio y el Ayuntamiento, que le otorgan un encanto especial debido a su excelente arquitectura. La Colegiata fue construida entre 1533 y 1780, y el Ayuntamiento entre 1676 y 1740. La imagen se ve completada por las fachadas de antiguas casas de época, ofreciendo una vista directa de cómo era Lorca siglos atrás. A lo largo del año alberga eventos culturales y religiosos de distinto tipo, y en el día a día se presenta como un lugar donde permanecer y disfrutar de la hostelería, contemplando un conjunto de hitos de la historia arquitectónica y urbana de la ciudad.

Calle de la Cava: vía muy tradicional en Lorca, nos descubre la pequeña Plaza de Simón Mellado, dominada por el conjunto arquitectónico del Conservatorio Narciso Yepes. Parte del edificio se asienta sobre otra torre de la muralla almohade, claramente diferenciada del resto del edificio erigido a finales del S.XVIII.

Plaza de Santiago: área diáfana a las puertas de la Iglesia de Santiago desde la que disfrutar de su fachada de estilo Barroco. Los edificios residenciales de época y su arbolado completan la escenificación de un tradicional espacio urbano más de la ciudad.

Glorieta de San Vicente: creada en el S.XIX, aloja la Columna Miliaria de época romana, que marcaba la distancia hasta Roma desde este punto de la Vía Augusta, y también podemos localizar la Casa de los Guevara. La glorieta es un lugar lleno de vida, debido a su inserción en el tejido urbano de Lorca y a sus características paisajísticas, al juego entre el pavimento y el arbolado que la nutre.

Calle Santo Domingo: tramo final del recorrido, en primer lugar encontramos la Plaza Saavedra, junto a la aledaña Iglesia de Santo Domingo, que fue construida en los siglos XVI y XVIII. Más adelante llegamos a la Plaza Don Juan Moreno donde se sitúa el Museo Arqueológico, edificio original del S. XVII, junto con otros edificios residenciales antiguos, como la Casa de los Mula, del S.XVIII.

 

Fuente: Ayuntamiento de Lorca

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *